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MINISTERIO DE ORACION, INTERCESION Y LITURGIA ZONA 02

Los Misterios del Santo Rosario

Los Misterios del Santo Rosario
Misterios Tradicionales
 
El Rosario esta compuesto de dos elementos: oración mental y oración verbal.
En el Santo Rosario la oración mental no es otra cosa que la meditación sobre los principales misterios o hechos de la vida, muerte y gloria de Jesucristo y de su Santísima Madre.
 
Estos quince misterios originales se han dividido en tres grupos:
 
GOZOSOS  (lunes y jueves)
  1. La Encarnación del Hijo de Dios.
  2. La Visitación de Nuestra Señora a Santa Isabel.
  3. El Nacimiento del Hijo de Dios.
  4. La Purificación de la Virgen Santísima.
  5. La Pérdida del Niño Jesús y su hallazgo en el templo.

DOLOROSOS  (martes y viernes)

La Oración de Nuestro Señor en el Huerto.

  1. La Flagelación del Señor.
  2. La Coronación de espinas.
  3. El Camino del Monte Calvario.
  4. La Crucifixión y Muerte de Nuestro Señor.

GLORIOSOS  (miércoles, sábado y domingo)

  1. La Resurrección del Señor.
  2. La Ascensión del Señor.
  3. La Venida del Espíritu Santo.
  4. La Asunción de Nuestra Señora a los Cielos.
  5. La Coronación de la Santísima Virgen.

Misterios Nuevos 

Carta Apostólica Rosarium Virginis Mariae                         

JUAN PABLO II, 16 de Octubre del año 2002

LUMINOSOS  (jueves)

  1. El Bautismo de Jesús en el Jordán.
  2. La Autorevelación de Jesús en las bodas de Caná.
  3. El Anuncio del Reino de Dios invitando a la conversión.
  4. La Transfiguración.
  5. La institución de la Eucaristía.

¿COMO REZAR EL ROSARIO?

Para recitar el Rosario con verdadero provecho se debe estar en estado de gracia o por lo menos tener la firme resolución de renunciar al pecado mortal.

1. Mientras se sostiene el Crucifijo hacer la Señal de la Cruz y luego recitar el Credo.

2. En la primera cuenta grande recitar un Padre Nuestro.

3. En cada una de las tres siguientes cuentas pequeñas recitar un Ave María.

4. Recitar un Gloria antes de la siguiente cuenta grande.

5. Anunciar el primer Misterio del Rosario de ese día y recitar un Padre Nuestro en la siguiente cuenta grande. Los Misterios Gozosos son meditados los lunes y sábados, los domingos de Adviento y domingos después de la Epifanía hasta la Cuaresma. Los misterios Dolorosos son meditados los martes y viernes, y los domingos en Cuaresma. Los misterios Gloriosos son meditados los miércoles y domingos. Los misterios Luminosos son meditados los jueves.

 6. En cada una de las diez siguientes cuentas pequeñas (una década) recitar un Ave María mientras se reflexiona en el misterio

 7. Recitar un Gloria luego de las diez Ave Marías. También se puede rezar la oración de Fátima.

- Cada una de las siguientes décadas es recitada de la misma manera: anunciando el correspondiente misterio, recitando un Padre Nuestro, diez Ave Marías y un Gloria mientras se medita en el misterio.

- Cuando se ha concluido el quinto misterio el Rosario suele terminarse con el rezo del Salve Reina.

ORACIÓN

MARIA: Virgen, Madre y Señora nuestra, a ti suplicamos que, mediante tu maternal intercesión ante tu Hijo Jesucristo, nos alcances la gracia de vernos libres de las angustias y sufrimientos humanos, tan frecuentes en este mundo que vivimos; y concedas consuelo abundante para todos los que viven afligidos y en la opresión o marginación. Te rogamos también, tu que eres liberadora de cautivos, nos alcances la verdadera libertad de los hijos de Dios y nos hagas libres de cualquier esclavitud, de modo que experimentemos en nosotros la alegría de la salvación. AMEN.

Oración de Consagración a MARIA

Oh Madre mía, yo me entrego del todo a ti y en prueba de mi filial afecto te consagro desde este día mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón en una palabra: Todo mi ser. Ya que soy tuyo: Oh Madre de Bondad, protégeme y defiéndeme, como hijo y posesión tuya. AMEN.

JACULATORIAS

Puede usarse una de estas dos:

  • María, Madre de Gracia, Madre de Consuelo, Madre de Bondad y Misericordia, en la vida y en la muerte ampáranos ¡OH! Gran Señora.
  • ¡OH! dulce corazón de Maria sed la salvación del alma mía. ¡OH! Maria enséñame a decir Sí al Señor, ¡OH! Maria, enséñame a decir gracia al Señor. ¡OH! Maria en cada instante de muestra vida. 

Nuestra perfección consiste en ser conformes, unidos y consagrados a JESÚS. Totus tuus, Un lema inspirado en San Luis Maria Grignion de Montfort.

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